viernes, 13 de julio de 2012

Memoria Estelar por Rakel del Sol

Ilustración de Rissouli
 
En mi ventana, la primera estrella de este atardecer que quiere convertirse en noche.

Su luz brillante me trae un recuerdo y una esperanza, su minúsculo y constante brillar me habla de esa eternidad que nos hermana… con la luna, con el sol.

La veo vestirse de colores… cada pestañear es un espectáculo de la inmensidad… en una sola estrella.

Entonces comprendo que la estrella Soy Yo.

Entonces comprendo que la estrella Eres Tú.

Entonces comprendo que Somos un@ con la estrella, y que así como su minúsculo brillar en el firmamento es apenas el destello de un remoto pasado que se perpetua hacia el futuro en la luz, nosotros somos esa chispa inmortal que serpentea hilos de tiempo a través de las eras… y entonces comprendo que, al igual que la estrella, vamos irradiando colores, vamos vistiéndonos de verde de azul de amarillo, y no importa si mañana es rosa o si es negro, porque sigue siendo la misma luz la que parpadea desde otro mundo, porque sigue siendo la misma luz la que segundo a segundo, noche tras noche, luna tras luna, mundo tras mundo, sigue sosteniéndose intacta en la ventana de mis ojos…

Siempre es un misterio la verdad hasta que se revela. Milagrosas estrellas anuncian milenarias verdades que se multiplican en el cielo… perfectamente in-quietas… asombrosas, luces… luces en el firmamento! De a miles, Son tantos los misterios que se constelan en nuestro cielo! Cada estrella es una promesa! Cada estrella es un surco del que brota la flor que ilumina mi corazón…

Lotos resplandecientes, brújulas ancestrales, palabras de otra lengua que se me antojan divinas… sí.

Entonces también comprendo que Yo Soy la estrella que me mira. Mis ojos son ese destello que viaja en la luz y me toca, mi corazón es el que se incendia a la velocidad de la luz… y entonces me vuelvo el silencio y respiro...

Me vuelvo el primer hombre, la primera mujer. Me vuelvo el asombro mágico y la verdad irrefutable.

Soy esa silueta que camina descalza por un planeta bendito, estrellas brotan en las piedras, estrellas nacen en los ríos. La montañas me hablan en ese idioma que presiento… y no sé cómo de pronto voy naciendo cielo, voy naciendo mar…

Entonces comprendo la distancia que habita entre ese hombre primigenio y esta mujer que soy. Entonces comprendo que esa distancia está tejida de estrellas y entonces comprendo que el tejido es luz y que no existen las distancias.

Hemos atravesado mares y desiertos para volver. Hemos inventado miles de naves miles de rutas… para volver. Hemos atravesado el tiempo dibujando círculos hacia el cielo… para volver.

Y hoy estoy aquí, mirando la estrella que soy desde tiempos inmemoriales.

Pronto el giro minúsculo de la tierra te perderá en el horizonte… amada estrella. Pero volverás. Una y otra vez, volverás como todos estamos volviendo. El retorno se nos ha concedido desde que nos volvimos viaje, barca, vuelo.

Y volveremos. Cada día es un paso hacia ese fuego primero.

Hoy es otra estrella que titila hacia mi ser…

Y otra vez las nubes del silencio…

Estoy sentada en mi ventana. Viendo la estrella que ya no veo, pero que está, colgada de mis cabellos, dibujada en mi frente, prendida de mi pecho…

Todos nacemos hacia la estrella que nos parió…

Ha caído la noche.

Sospecho lunas, sospecho planetas viajando hacia el encuentro…

Y entonces imagino el bello firmamento que dibujamos

Entonces sospecho la fiesta que constelan nuestros pasos,

Y es entonces cuando comprendo que Somos el infinito el misterio y la luz, cuando nos miran desde la otra ventana…



"Benditos Soles, Benditas Lunas, Benditos Seres Humanos nacidos para trascender, nacidos para soñar constelaciones en este firmamento verde que destella colores, que destella mariposas, que destella flores…

Benditas estrellas eclipsadas en cada una de sus miradas…

Benditos pulsos, benditos corazones nacidos para estallar, nacidos para resplandecer hacia la muerte, hacia esa oscuridad que se disuelve que se suspende que se abisma.

Entonces recuerdo que la noche existe para la estrella, que la oscuridad emerge para la luz, que la muerte nace para la vida…

Y entonces recuerdo que estrella luz y vida son el argumento que sostiene la noche, que sostiene el negro oscuro que asociamos a la muerte, y que la muerte es sólo la sombra que proyecta la luz, y que todo nace de ese sol que está fuera y dentro, y entonces recuerdo que somos otros universos, que somos noche que somos día, que constelamos sinfonías y que en ese viaje hacia nuestro sol vamos cambiando de colores, de paraísos, de cielos, y que en ese viaje vamos mueriendonaciendo, vamos soñando vamos creando, y en ese sueño vamos volando, vamos danzando, vamos riendo, en ese destello vamos llorando, vamos gimiendo, vamos cantando, y es en ese canto que vamos siendo, como la estrella que titila, desde ahora para siempre, desde ayer para mañana… la divinidad que nos sostiene, la divinidad viviéndose, la divinidad creándose, la divinidad recordándose, y es entonces cuando mi vida, mi cuerpo y mi canto se convierten en la ofrenda perfecta para celebrar a la diosa que nace todos los días, a los dioses que beso todos los días, a las manos celestes que sostienen a esa diosa y a esos dioses, al diagrama perfecto que sostiene esas manos, y a la luz que expande aquel mandala a través del cosmos…"
Rakel del Sol