Los ritos son acciones simbólicas que tienen que ver con lo sagrado, son realizadas generalmente en un contexto grupal, conforme a normas o rúbricas, repetidas con cierta periodicidad, con la intención de hacer presente el mundo trascendente.
A través de los ritos, guiamos nuestra existencia, ponemos orden a nuestras vidas. "Hacemos un alto en el camino" para relacionarnos de manera diferente con nuestro mundo interior, con los demás y/o con el universo.
"Temazcal" Juliaro palomailustrada.blogspot.com |
Los ritos están presente en toda nuestra vida y las mujeres llevamos dentro el ADN ceremonial. Somos por naturaleza "Mujeres Ritual".
La ciclicidad de nuestros procesos vitales, nos hacen celebrar una y otra vez la vida - muerte - renacer - vida - muerte -renacer... en el sin fin de la existencia. Y sabemos la importancia de lo que simboliza cada portal por el que transitamos.
Aprendemos desde pequeñas a construir nuestra identidad en el "espacio relacional" a través de la expresión verbal y corporal. Es por ello, que siempre estamos "con" los otr@s, "para" los otr@s y "por" los otr@s (lo que tiene ventajas y desventajas, pero eso lo hablaremos en otro momento). A lo que voy es que SIEMPRE se ve a las mujeres en grupo, estamos constituidas para estar en manada.
Y cuando vibramos con el fluir de la existencia, no podemos "dejar pasar" auqellos momentos de nuestra vida y de la vida de los que amamos, que nos hacen sentir diferentes, que nos muestran nuestro crecimiento, que se relacionan con un cambio de estado ya sea físico, mental, emocional o espiritual.
Cada vez que sentimos la necesidad de hacer un alto en nuestras vidas y marcar de manera simbólica ese momento, nos conectamos con la "Mujer Ritual" que poseemos.
Organizamos nuestras energías y empezamos a recordar la importancia de celebrar, hacemos un espacio en nuestra vida para celebrarnos y compartir junto a otr@s ese momento que sin darnos cuenta, marca un antes y un después.
Cada una de nosotras es capaz de "detenerse" para conectarse con lo trascendente, con lo que va más allá de nuestra persona, lo transpersonal. Somos capaces de hacer sagrado lo cotidiano.
Y que más placentero de hacerlo junto a otras mujeres, dejándonos llevar por la energía espiral que aflora en los círculos femeninos.
Volvamos a cantar, reir, jugar, bailar y crear, honrando los momentos de la Vida de Las Mujeres. Celebremos nuestro pasar por los distintos portales de nuestra existencia acompañadas por nuestras madres, abuelas, amigas, hermanas, tías, vecinas, compañeras, lobas.
Recordemos que somos Mujeres Sagradas, despertemos a la Mujer Ceremonial" que nos habita, sigamos su ruta para que sigan vivos los rituales entre mujeres.
Dedicado a Evelyn, quien escuchó fuertemente el latir de su "Mujer Ritual" y a Myrna, quien tránsita en el Umbral de La Diosa del Compromiso.
Gracias por confiar y permitirme ser parte de aquella ceremonia.
En amor, Claudia