Priscila Noronha |
"El sangrado libre es una técnica que te permite liberar tu menstruación de una manera muy parecida a lo que sería vaciar tu vejiga. Esto se debe a que puedes ser consciente de tu cuerpo y sus necesidades básicas. La Menstruación Consciente es un método sencillo y natural que ha sido practicado durante miles de años. Al aplicar este método, fortaleces también tu suelo pélvico y evitas cólicos menstruales.
¡Pero eso es imposible!
Estarás pensando: "Pero el útero no tiene esfínter, entonces ¿cómo podría alguien controlar su sangrado menstrual?"
De hecho, existe evidencia interesante que indica que el cérvix es en realidad un esfínter. Pero aunque éste no fuera el caso, sigue teniendo sentido que pongamos atención a las sensaciones y patrones de nuestro flujo. Después de todo, la mayoría de lxs adultxs no andan por ahí constantmente con moquillos colǵandoles de la nariz, ni siquiera en invierno, aunque tampoco tenemos un esfínter en nuestra cavidad nasal.
Ajá, cómo sea. Yo solo estoy aquí para deshacerme de los cólicos.
¿Y quién podría culparte? Los cólicos pueden ser terribles.
Manejo de los cólicos
Si estás leyendo esto porque quieres aliviar tus cólicos, sigue leyendo! Los cólicos van desde ligeramente inconvenientes hasta espasmos musculares del útero, los cuales pueden ser causados por distintas razones. La discusión sobre el “sangrado libre” apunta hacia el querer retener nuestra menstruación como una de las razones más frecuentes es que inconscientemente queremos retener nuestra menstruación. Esto puede fácilmente convertirse en un círculo vicioso:
Tu útero recoge tu menstruación y espera que la liberes. Cuando no lo haces, tu útero protesta (piensa, por ejemplo, en el dolor que te provoca aguantarte las ganas de orinar). Como te duele, instintivamente contraes los músculos, impidiendo la liberación, y entonces el dolor empeora. Eventualmente, tu menstruación saldrá gota a gota por un cérvix apretado, causando un goteo continuo en lugar de una liberación periódica, y por supuesto, más dolor.
¿Cómo podemos evitar esto?
La respuesta corta es relajándote a consciencia. De eso se trata realmente el Sangrado Libre: reconocer la necesidad de liberar y luego relajar los músculos. El ejercicio pleno de Liberación Menstrual ayuda a aliviar la tensión y cólicos menstruales, pero ¿qué hacer si necesitas estar en un lugar donde no puedes ir al baño cada 15 minutos, o si simplemente no estás interesada en hacer eso.
Ayuda mucho que relajes tus músculos pélvicos para facilitar la liberación. Si no estás practicando el Sangrado Libre, intenta practicarlo usando cualquier tipo de producto que acostumbras usar. Las toallas femeninas de tela permiten más fácilmente la liberación que las tollas desechables, y ambas son mejores que los tampones o la copa menstrual en este sentido. Cuando menos, procura evitar contracciones o tensión en tus músculos pélvicos.
Claro que los cólicos también podrían ser provocados por algo muy distinto, pero cualquiera que sea su origen, la contracción de los músculos pélvicos empeorará tus cólicos, entonces relajarte debe al menos aliviar el dolor.
Cómo evitar “accidentes”
Al principio, cuando estás empezando a experimentar el Sangrado Libre, a entenderlo, habrá varias veces en que tu flujo te tomará por sorpresa. Prepárate para esto, pero no te preocupes. Idealmente, tendrías un espacio adecuado para experimentar durante tu menstruación, y usar una toalla que de preferencia sea de tela orgánica cuando tengas que salir. Si no puedes hacer eso, haz lo que puedas siempre que puedas; no es un compromiso estricto. Conozco mujeres que practican la Liberación Menstrual en las tardes y utilizan una copa menstrual en el trabajo, y mamás que se dedican al hogar y a cuidar a sus hijos pequeños, usando ellas toallas, porque al ser mamás de bebés no tienen la oportunidad de ir al baño cada 3 horas en promedio. Disfruta tus logros, deja que tu cuerpo lentamente aprenda el arte de la liberación y permite que tu cérvix y vagina se contraigan naturalmente entre sesiones de liberación. Recuerda tratarte con a misma paciencia por la que comprenderías que una niña de 2 años necesita mucho cariño, paciencia y confianza.
Durante la noche
Inicialmente, es buena idea usar algún tipo de protector recipiente durante la noche, pero luego encontrarás que durante la noche sangras menos, pues estarás dormida y no consciente. Clar que al despertar, debes pararte e ir a liberar tu menstruación rápidamente, pues tu flujo querrá salir una vez que te despiertes y te pares.
Entonces... ¿qué es lo que tengo que hacer?
Empecemos con lo que NO debes hacer. No se trata de explusar a voluntad tu sangre, ni tampoco sobre cómo retenerla-
Lo que aprenderás, en contraste, sera cómo detectar cuando tu útero necesita liberar tu flujo menstrual y consejos para actuar habiendo este impulso -el resto vendrá con el tiempo.
Lo repetiremos: Esta Consciencia Menstrual no se logra entrenándonos para retener la sangre, se trata de aprender a dejarla fluir cuando la necesidad ésta surja. Con el tiempo, esto les permitirá al útero, cérvix y vagina recuperar la tonicidad muscular perdida y con esto, la habilidad natural de acumular un poco de tu menstruación antes de liberarla sin derrames. Sé paciente contigo misma, y recuerda -solo tienes algunos días al mes para practicar. Casi inmediatamente verás resultados iniciales (como una disminución y alivio en cuanto a cólicos y un patrón básico de “ondas” de liberación) y gradualmente irás notando más avances.
Tips para la relajación necesaria para la liberación menstrual
* Respira lento y profundo, que tu respiración sea con todo tu torso. Concéntrate en tu respiración durante unos pocos minutos. Siente cómo entra el oxígeno y visualiza cómo circula por cada célula de tu cuerpo.
* Siéntate o incluso estando parada de manera que tu pelvis se encuentre en una posición “baja” y relajada. O imagínate algo más que te ayude a visualizar una liberación: agua fluyendo, flores abriéndose, lo que sea.
* Asegúrate que tus músculos estén relajados, especialmente aquellos alrededor de tus ojos y boca, así como entre tus cejas y frente. La tensión facial está íntimamente conectada con la tensión en todos tus esfínteres.
* Medita mientras miras algo frente a ti, escuchas los sonidos de la calle, algo interesante que te sucedió hace poco, lo que sea, mientras te “distraiga”
¿Cómo sabré que debo liberar mi sangre?
Existen tres señales que te ayudarán a saber cuándo debes liberar:
1. De repente sentirás ganas de orinar, pero no con urgencia urgente, y sabrás que no tiene sentido.
Esta es la señal de que debes ir al baño! Esta sensación parecida a las ganas de orinar es simplemente tu cerebro representando de manera equivocada la señal de tu útero de que es el momento de liberar tu menstruaicón. Puesto que “sabes” que no puedes sentir venir tu menstruación, tu cerebro no sabe cómo interpretar la información, entonces interpreta lo más cercano que reconoce. Especialmente al principio de este ejercicio, puedes sentir la necesidad de liberar muy frequentemente - incluso casa 10-15 minutos. No te preocupes, esto es normal y mejorará (aunque los días de flujo abundante son siempre ocupados).
2. Si sientes cólicos o "presientes" que vas a comenzar a experimentarlos
Los cólicos e incomodidad alrededor del útero son una señala para ir al baño y liberar. Con frequencia, estos cólicos son el resultado de tu cuerpo reflexivamente tratando de retener la sangre (pues espera que tú activamente la liberes. Al relajar tus músculos pélvicos y dejar que tu flujo menstrual realmente “fluya” puedes eliminar o aliviar significativamente los cólicos.
3. Sientes que tu menstruación empieza a gotear.
Podrías pensar que ya es demasiado tarde, pero probablemente tengas unos cuantos segundos para correr al baño, quizás hasta un minuto o dos. Esto es porque lo que estás sintiendo es realmente tu flujo menstrual, fluyendo de tu cérvix y hacia tu cavidad vaginal, donde se acumula durante un corto tiempo.
¿Cómo la “libero”?
Primero, encuentra una posición cómoda para sangrar libremente. Muchas mujeres pueden hacerlo cuando orinan, pero quizás debas probar algunas otras posiciones para facilitar el sangrado libre en cualquier otro momento posible. Puede ser desde estar en cucillas completamente o solo parcialmente, sentada con las piernas un poco en alto, doblada hacia el frente, u otras posiciones similares (no es ninguna casualidad que estas mismas posiciones también se recomiendan para partos naturales activos).
Estando en una posición adecuada, relájate. Si alguna vez has meditado o incluso solo soñado despierta, esa experiencia te ayudará. Solo sé paciente y trata de enfocar tu atención en algo más por un momento.
Tips para relajarte:
* Respira lenta y profundamente, con todo tu torso. Concéntrate en tu respiración durante unos minutos. Siente como entra el oxígeno a tu cuerpo.
* Asegúrate que tus músculos faciales están relajados, especialmente los músculos alrededor de la boca y los ojos y entre las cejas. La tensión facial está íntimamente conectda con la tensión del esfínter.
* Enfoca tu atención en algo: un objeto frente a ti, el ruido de la calle, algún evento que te ocurrió durante el día, lo que sea mientras te ayude a relajarte.
* Imagina que tu cérvix se abre suavemente y libera tu menstruación. O dibuja en tu mente escenario o situación que te haga sentir que algo se libera... agua fluyendo, flores abriéndose, lo que sea.
NO hagas ningún esfuerzo por empujar tu menstruación! Esto es importante tanto para tu sangre menstrual como para cualquier otro desecho del cuerpo. El útero, la vejiga y los intestinos poseen músculos involuntarios que se contraen para vaciarse. Al empujar activamente, los músculos voluntarios crean una presión externa en los órganos internos, exprimiendo su contenido para que éste salga. Con esto, se destruye el sistema de retroalimentación de los órganos internos, poniendo en desuso sus músculos y eventualmente aplicando presión y debilitando el suelo pélvico."
(Fuente: Menstrual Release http://